Trece mil trescientas treinta y tres, ni una mas ni una menos, son estas las nubes oveja que puedo contar en el cielo, la ultima de todas ellas lleva una margarita en la boca, debe de venir esta nube en el aire de un lugar donde empieza la primavera.
No entiendo porque hay que contar ovejas por las noches a oscuras y en silencio, de día mirando al cielo puedes inventarte un sueño buscando en sus formas, un sueño a la carta para saborearlo como debe de hacerse con los sueños.
Trece mil trescientas treinta y tres, ovejas juegan a comerse margaritas por los cielos.
Sant Pol de Mar, 22 de noviembre 2011
Esteban Mediterraneo
No entiendo porque hay que contar ovejas por las noches a oscuras y en silencio, de día mirando al cielo puedes inventarte un sueño buscando en sus formas, un sueño a la carta para saborearlo como debe de hacerse con los sueños.
Trece mil trescientas treinta y tres, ovejas juegan a comerse margaritas por los cielos.
Sant Pol de Mar, 22 de noviembre 2011
Esteban Mediterraneo
"Trece mil trescientas treinta y tres, ovejas juegan a comerse margaritas por los cielos", parece un travalenguas. Impresionantes esas nubes, siempre me gustó mirar las nubes...
ResponderEliminarTrece mil trescientos treinta y cuatro,.....zzzzzzzzzzzzzzy dos copitas de cava para celebrar que en este punto me quede dormida.
ResponderEliminarUn besin efervescente para todos.
Belensita
Vaya Esteban precisamente los números que me guste el 13 y el 3, eso es una buena señal y que sepas que para dormir, mejor que contar ovejitas es contar besos, besos de sabores, de colores, de sueños, es lo mejor para descansar mientras escuchas palabras dulces oyendo el sonido de las caracolas, dulces sueños.
ResponderEliminarMaria Caracola.
Juraría que son trece mil trescientas treinta y dos!!!! jajajajaaja.
ResponderEliminarBonita entrada!!!!
Valeria.
Hay un dicho..BORREGUITOS EN EL CIELO..CHARQUITOS EN EL SUELO...asi que amenzan lluvia...Y estoy de acuerdo.. en parte... con Maria Caracola.. mejor contar besos pero mientras te los vayan dando...
ResponderEliminarBuen fin de semana a todos...
Dulce de miel
Viento eres un solete tendrias que cambiar tu nick.
ResponderEliminarHas sido capaz de que mire al cielo cada vez que salgo, tienes amigo Esteban una propiedad.
Sin ser distante de la realidad y critico con la injusticia tienes alma de niño poeta.
Gracias por todas las cosas que nos envias, me haces falta.
Auri y un beso de Rosa que se anda por las ramas y me da el encargo.
Un abrazo para todos los inquilinos de la Casa del Viento, eso.
Si tienes tiempo y ganas de contar nubes, quiere decir que estás bien, Esteban.
ResponderEliminarMe has recordado con tu relato que yo hace tiempo que no miro el cielo, que no gozo de esa sensación de inmensidad que te produce el ver la naturaleza que te rodea, ya sea el cielo, el mar, los paisajes de tierra y agua,… y es conveniente … es conveniente sentirte parte de ese todo, aunque sea una parte insignificante …
Es curioso como la rutina, el día a día, te va atrapando y te impide hacer cosas tan sencillas y a la vez tan vitalizantes como el conectarte con aquello de lo que formas parte.
Cuando deje de escribir estas líneas me voy a mirar el cielo, que lo sepas,… y os voy a enviar buenas deseos, o vibraciones, a todos los inquilinos de la Casa del Viento
J.Ramon
Supongo que mirar las nubes nos puede llegar a a transportar a un estado de ingravidez,de sensación de ir entre esas nubes volando con ellas,mezclandonos en ese cielo infinito,lleno de todos los sueños que seamos capaces de inventarnos ,de soñar y de regalarnos y regalarlos. Es tiempo de nubes venideras,otoño ,invierno,podremos contar a gusto nubes,nubarrones y nubecillas. Así cuando luzca el sol lo saborearemos mejor.
ResponderEliminarRosa Ingrávida.
Veo que el otoño os sienta bien
ResponderEliminarA mi amigo Esteban, le es facil como Viento, contar las nubes , pues el las mueve,pero a mi lo que me llama a curiosear es el numero , mas bien lo magico del numero, vinculado a ese cielo bello y borregil.
Numerologicamente hablando el 13333, si sumamos todas sus cifras nos da el numero 13 .
En numerologia ese numero primo tiene unas connotaciones especiales , atrae el cambio , proboca reflexion , induce a opinar...
En Astrologia ese numero es el del signo evanescente ,es el OFIUCO, el treceavo signo zodiacal que se manifiesta cuando los cambios se acercan...
El amigo viento que va i viene , lo percibe , supongo que la Xana tambien y las abejas en sus colmenas le diran a Dulce que este alerta . que vienen cambios , y las niñas flores en el jardin miraran al cielo donde pronto se veran espectaculos ajenos al hombre.
Y mi amigo Agua , ser de luna y plata, notara un fluir distinto, que no solo le hara mirar al cielo , tambien se iniciara en desapegos...
Señoras y señores acomodense en sus asientos, a partir de ahora veran y espero que comprendan los cambios
Tierra oraculo
Leo, miro las nubes....no es para mi
ResponderEliminarun paisaje extraño.
Cada amanecer, abro los miradores de mi hogar
.....miro el cielo respiro profundamente y siento que un nuevo día comienza, suelo alcanzar el horizonte y alli depositar, mi más bello recuerdo,un pensamiento.
Amigo Jose Ramón.....no deje de practicarlo
relaja, descubre, imagina, se piensa y se sueña.
Amigo Diego, me descoloca, siempre haciendome averiguar, expliqueme , me dejo a medias.
Que cambios?... no me deje con la duda.
Dulce....explicame tú....
Xana....El amigo Tierra oraculo.. dice que tu debes saber...y las hadas? ( sonrio )
Esta noche contare estrellas..no para dormir
para, recordar lo hermoso que vivi en momentos
donde las estrellas eran mi luz.
Amigo Viento, una fotografia donde , todos seguros todos hemos pensado e imaginado...en que pensaba usted..al contar ovejitas...
Besos como siempre ( Hada romantica. )
Hada Mar.
Pdta: El cielo esta lleno feliz noche para todos. Felices sueños.
O sea, que se puede volver uno tonto, de tánto contar, jajaja, un abrazo y buena entrada.
ResponderEliminarSeguro que has contado a la perfección, ni una más ni una menos... Ese cielo provoca mariposas en el estómago!Es precioso como el viento de tu casa que deshoja margaritas para que lluevan pétalos sobre nuestras almas.
ResponderEliminarBeso enorme, amigo Esteban!