La mala hierba.
Debajo de sombras de las rosas de un jardín existe un mundo diminuto y olvidado al que solo se trata con herbecidas, son las malas hierbas, esas que crecen libres y espontáneas robando un poco de agua a flores oficialmente bellas y glamorosas, y en su lugar se añade corteza de pino, piedritas blancas todas iguales de redonditas que contrasten con las lujosas flores y den sensación de limpio y ordenado.
Algunas de estas hierbas rebeldes hacen de los campos paisajes primaverales de amapolas y margaritas silvestres , otras sin embargo pasan desapercibidas por su pequeño tamaño a la sombra de otras plantas ornamentales “ oficialmente bellas “ .
Les dedico hoy estas líneas como espectador agradecido a esas diminutas flores siempre olvidadas, malditas e inoportunas que intentan robar algo de sustento a las rosas y a las azucenas que estos días brillan en primavera.
Sant Pol de Mar, 25 de mayo de 2009
Esteban Mediterráneo.
Debajo de sombras de las rosas de un jardín existe un mundo diminuto y olvidado al que solo se trata con herbecidas, son las malas hierbas, esas que crecen libres y espontáneas robando un poco de agua a flores oficialmente bellas y glamorosas, y en su lugar se añade corteza de pino, piedritas blancas todas iguales de redonditas que contrasten con las lujosas flores y den sensación de limpio y ordenado.
Algunas de estas hierbas rebeldes hacen de los campos paisajes primaverales de amapolas y margaritas silvestres , otras sin embargo pasan desapercibidas por su pequeño tamaño a la sombra de otras plantas ornamentales “ oficialmente bellas “ .
Les dedico hoy estas líneas como espectador agradecido a esas diminutas flores siempre olvidadas, malditas e inoportunas que intentan robar algo de sustento a las rosas y a las azucenas que estos días brillan en primavera.
Sant Pol de Mar, 25 de mayo de 2009
Esteban Mediterráneo.
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