Ya les vale a los políticos de la transacción, resulta
penoso verlos rasgándose las vestiduras porque el pueblo ha dicho que no los
quiere y que sin ellos todo serán llantos y crujir de huesos, supongo que algo
parecido debieron pensar otros cuando vieron instalarse en las cortes a
Santiago Carrillo y Dolores Uribarri.
Ver a Felipe González usuario empedernido de los consejos de
administración como a José María Aznar tal vez mareados ambos por las puertas giratorias,
despotricando del voto popular porque no coincide con sus intereses da mucha
pena.
Es verdad que no existe ningún partido con programas a la
carta, todos tienen algo que no nos gusta pero menos aun los que se instalaron
en la corrupción y la demagogia hace un montón de años. La gente avisó dijo en las manifestaciones que
algo iba mal y de aquellos vientos estas tempestades.
La gente de la calle subida a la tribuna de oradores del
congreso con ropa de calle, ahora cualquier ciudadano puede hacerlo, puede hacer
oír su voz, el rey está en horas bajas, los
jueces dejan ver la mierda que nos ha atenazado ¡! Por fin ¡! Y los dinosaurios
de la vieja guardia pierden los papeles diciendo conmigo si con ellos no…Pero
esos políticos no son candidatos no figuran en las las listas, son consejeros
delegados de empresas y bancos.
Es verdad que el momento es de una confusión terrible, es
verdad que los partidos emergentes son bastante torpes en particular los que
dicen que no aspiran a gobernar y luego escogen sus ministerios antes de empezar
a negociar sus programas, es verdad que las izquierdas nunca se an unido y es también
verdad que se necesitamos un buen gobierno.
Lo dicho por la sociedad es las urnas es un mandato,
negociar y dejar de decir mamarrachadas, no nos contéis mas bobadas que parece
que habláis en campaña electoral, es el momento de organizar este país y
librarlo del robo, el abuso y la corrupción.
Si hay que bajar los humos a los conservadores que los bajen
y si alguien tiene que cortarse la coleta que se la corte.
Garrulomán cabreado.
Sant Pol de Mar, 31 de enero de 2016